No es la primera vez que os decimos que nos mueve la energía, y de hecho, es nuestra forma de vida, también en una de sus facetas más bella para aquellos que aman las motos.
Por ello, Caramanzana volvió a disfrutar del rugido de los motores de dos ruedas, algo empañados, como es lógico, por la triste noticia de la muerte del joven piloto español, Luis Salom, el pasado viernes.